Otro desvario mas...

Por tratarse de la primera del mes de Diciembre, esta entrada será uno de mis desvarios sin sentido. La diferencia de este con respecto a otros que suelo desarrollar (lo hago a menudo y evidentemente no lo publico en ningún blog, es algo más personal)es que se ha gestado desde una posición vital absoluta, rotunda y extraordinariamente nueva para mi: PAZ.

Miro unos meses atrás y veo cuanto ha cambiado todo en mi vida y lo mejor de todo, es que para bien. Si bien es cierto que no creo demasiado en el concepto de felicidad, si me estoy dando cuenta que sentirse en paz con uno mismo y su entorno es básico para sobrevivir dignamente en este mundo. Solo me jode que para descubrirlo, haya necesitado una de las crisis económicas mas graves de la historia y tener un romance con ese gran monstruo (hasta ahora muy alejado de mi) llamado paro. Evidentemente no es cómodo no saber de que vivirás en un futuro, como te las arreglarás para pagar el montón de facturas que llegan cada mes, etc. pero como tiendo a ser optimista por naturaleza en estos asuntos, tengo el convencimiento de que todo se solucionará; mientras saboreo este placer de vivir en paz.

No es exagerado ni cachondeo, aunque parezca un tópico y sea tan frecuente decir que he estado ni siquiera sé cuantos años viviendo por y para el trabajo, pero lo excepcional de mi caso es el ambiente que me rodeaba. Me había habituado a la mala educación, a la brusquedad, al maltrato psicológico y muchas otras cosas que aquí y ahora me avergüenza admitir, pero no solo como víctima, sino como practicante. Tras tanto tiempo ejerciendo de CABRON (hablando claro), el cuerpo y la mente lo acepta y asume como un modo normal y natural de actuar y te impide ver el daño que realmente puedes provocar (a veces hasta sin quererlo, pero la mayoria con tota premeditación) a los demás y sobre todo a ti mismo. Me había habituado a convivir permanentemente con la rabia y la crueldad y ahora, mirándolo desde la distancia, entiendo muchas de mis reacciones básicas a lo largo de los años, el abuso de alcohol, juergas de las chungas, enfermedades, etc… todo era provocado por la puta rabia sin saber hacia quien o que, solo rabia y mala leche en si misma, casi autónoma.

Y en tan solo un par de meses, tan solo conociendo a gente nueva (no reniego de la de antes ni la critico, estaban o están en la misma situación que yo), haciendo cosas distintas y nuevas, viviendo con otro ritmo (hallar nuestro ritmo vital es tan importante como difícil de conseguir) todo ha cambiado. Es tanta la paz, que ni siquiera me importa ni molesta pensar la cantidad de años que he malgastado en este proceso; ni me molesta no arrepentirme de nada (lo hecho, hecho está), ni me molesta no tener la necesidad de predicar ni aconsejar a nadie, es decir, no me molesta seguir siendo sumamente egoísta, lo asumo y lo digiero en paz.

Teniendo en cuenta mis antecedentes, no me atrevo a predecir cuanto durará esta actitud, pueden ser años, meses o días, pero si adquiero desde ya el compromiso de luchar por mantenerla, siento que me va la vida en ello.